¿Cómo se puede reducir el gasto energético en las grandes ciudades? ¿Cómo se puede mejorar la movilidad reduciendo el tráfico y promoviendo el uso de transportes no contaminantes? ¿Cómo se optimiza la recogida de residuos? ¿Cómo se puede fomentar la participación ciudadana y la transparencia en la gestión? Y en general, ¿cómo podemos mejorar la calidad de vida de las personas que viven en las ciudades?
Estas son algunas de las preguntas que se repetirán esta semana en Barcelona durante la celebración del Smart City Expo World Congress, un evento mundial en el que se debate sobre el concepto de ciudad inteligente, y en el que se presentan las mejores iniciativas aparecidas durante el último año. Establecer unas dinámicas más eficientes y sostenibles en el día a día de las ciudades debe ser una prioridad para las instituciones públicas, pero también para el sector privado, y especialmente para todos aquellos emprendedores que quieran sacar adelante proyectos innovadores y útiles para la sociedad.
Barcelona se ha convertido en los últimos años en un referente en lo que respecta a smart cities, e incluso ha empezado a trabajar en la idea de smart region, una red de municipios que unen esfuerzos para aplicar proyectos comunes compartiendo gastos y multiplicando resultados. El congreso internacional que organiza esta semana sirve también para intercambiar experiencias con otras grandes ciudades comprometidas con el concepto de ciudad inteligente, y para que emprendedores de todo el mundo expongan sus ideas y sus proyectos: desde una aplicación para facilitar el aparcamiento de coches y motos y ahorrar tiempo y dinero a los conductores, hasta sistemas de análisis de big data que ayuden a regular mejor el tráfico; desde soluciones urbanísticas que imaginen barrios más interconectados hasta sensores que analicen al detalle la movilidad de las personas; desde herramientas que eviten el desaprovechamiento del agua hasta innovaciones tecnológicas que faciliten el acceso a internet en cualquier punto de la ciudad… Las posibilidades que las smart cities ofrecen a los nuevos emprendedores son infinitas.
Una de las principales características del concepto smart cities es su carácter transversal y multidisciplinario. Si bien en los últimos años se ha incidido sobre todo en iniciativas relacionadas con el ahorro energético, la movilidad y las nuevas tecnologías, ahora también existe un gran interés por trabajar en otros campos de utilidad general como la gobernanza, la participación ciudadana, el turismo o la educación. Un objetivo que conecta perfectamente con la filosofía del ICEB, que no solo funcionará como incubadora de startups sino que también quiere ser un referente en formación –a través de sus cursos, másteres y conferencias- y en consultoría. Además de promover, como en el caso del Smart City Expo World Congress, una red de conocimiento y de colaboración entre emprendedores de todo el mundo.